Tres cosas que debes saber sobre los avistamientos de tiburones en la costa:
1) El fenómeno siempre ha existido y lo que ha cambiado radicalmente con el apoyo de las redes sociales es la hipermediatización del fenómeno más que el comportamiento de los tiburones.
2) El fenómeno es más una señal de aumento de la angustia entre los animales que un aumento de su número o un cambio estructural en su comportamiento. Sin un estudio en profundidad o incluso una autopsia de los animales implicados, es muy difícil entender la razón, que puede basarse en tres hipótesis básicas: (i) un animal enfermo por una causa infecciosa (encefalitis bacteriana, por ejemplo) o hiperparasitosis, (ii) un animal herido (por anzuelos despues de una captura accidental en un palangre o como resultado de un conflicto con un pez espada), (iii) una alteración de su orientación a través de los campos magnéticos terrestres que utiliza para desplazarse a gran escala.
3) El riesgo real para el ser humano es prácticamente nulo. A excepción del tiburón blanco y el mako, se trata normalmente de tintoreras que se alimentan de peces y calamares, y son totalmente incapaces de atacar a los humanos con fines depredadores. Si intentas acercarte o agarrar al animal, es posible que te muerda a la defensiva. Así que absténgase de cualquier interacción.
En presencia de un tiburón, todo lo que se requiere es una vigilancia razonada y una retirada lenta y controlada del agua: cerrar las playas en caso de avistamiento de un tiburón provoca ansiedad y debería limitarse a la existencia de un peligro real.